Tras el triunfo del Brexit en Reino Unido, Vodafone está estudiando la posibilidad de trasladar su sede de allí. Por el momento no hay nada definitivo y la operadora ha aclarado que continuará evaluando la situación para tomar la decisión “apropiada” para los intereses de sus clientes, sus accionistas y sus empleados.
La operadora, contraria al Brexit, ha destacado en un comunicado las ventajas que representa para Reino Unido y su negocio en el país la pertenencia al club de los Veintiocho. Así, desde Vodafone han destacado que la gran mayoría de sus 462 millones de clientes, 108.000 empleados y 15.000 proveedores están fuera de Reino Unido y remarca que su negocio europeo, excluyendo Reino Unido, representó el 55% del Ebitda del grupo en el ejercicio 2015-2016, frente al 11% que correspondía al negocio británico.
Así mismo, la operadora subraya que la pertenencia de Reino Unido ha sido un «importante factor de crecimiento» para el grupo y asegura que la libre circulación de personas, capitales y bienes es clave para cualquier negocio paneuropeo, al igual que un único marco legal para todos los estados miembros.
En este sentido, Vodafone ha hecho referencia a mercado único digital europeo, que favorecería tanto a operadores como a clientes de toda Europa. Para Vodafone, sería una “oportunidad significativa” para Reino Unido, a quien considera una de las economías digitales líderes a nivel global.
Pero por el momento, la operadora no se aventura a definir su situación en Reino Unido aunque ha recordado que sus divisiones regionales se adaptan a las condiciones locales y reitera su compromiso de seguir apoyando a los clientes de Reino Unido. Además, asegura que continuará invirtiendo en su negocio en el país en el futuro.