El nuevo portátil de LG, llamado Slimbook, hace honor a su nombre porque se caracteriza en primer lugar por la delgadez de sus componentes y por su escaso peso, unos 980 gramos, algo menos de un kilo, por tanto. La ligereza es, pues, uno de los valores más significativos de este portátil; porque para pesar tan poco, los ingenieros de LG no han optado por la posibilidad de quitar componentes del equipo, sino que han preferido reducir el tamaño de cada elemento a su mínima expresión. Los ingenieros se han esforzado por adelgazar incluso los tornillos del portátil.
La pantalla del LG Slimbook, que apenas llega a los 13,4 milímetros de grosor, alcanza las 14 pulgadas. El grosor del aparato es el estrictamente necesario para contener un puerto USB 3.0. La pantalla está basada en tecnología IPS y Full HD, con una resolución de 1.920 x 1.080 píxeles. La delgadez también se ha buscado en la carcasa; tanto es así que ello le resta solidez, pues se hunde bajo una leve presión.
Otro de los puntos fuertes del portátil es su velocidad de arranque. Necesita siete segundos para funcionar y diez para estar operativo. Hay que decir, no obstante, que estos ritmos son los propios de un portátil de la última generación. El sistema operativo corre gracias a un procesador i5 que funciona a 2,20 GHZ. Por su parte, la memoria en disco llega a los 256 gigas.
La batería, compuesta por dos celdas, trajina a 4.555 miliamperios, capaces de dotar al portátil de ocho horas de autonomía. Otra de las ventajas del portátil es su resistencia al calentamiento. Destaca, de hecho, por su capacidad para disipar el calor que él mismo genera. Así pues, el sobrecalentamiento no es un problema de este equipo.
El precio de compra de este portátil LG Slimbook es de 1.199 euros.
