Toshiba ha escogido a un consorcio japonés para vender su rama de chips de memoria, Toshiba Memory. Con esta operación la compañía espera paliar sus problemas financieros. La alianza está constituida por el fondo japonés público-privado Innovation Network, el Banco de Desarrollo de Japón y la firma de inversión estadounidense Bain Capital.
Además, y según medios locales, también incluiría al fabricante de chips surcoreanos SK hyinx, aunque la compañía japonesa no se refirió a ello.
“La presentada por el consorcio es la mejor propuesta, no sólo en términos de tasación”, sino también con respecto la certidumbre de cerrar (el acuerdo), la retención de empleados y el mantenimiento de tecnología sensible en Japón”, explicó Toshiba en un comunicado.
La oferta superaría la tasación de 2 billones de yenes (16.140 millones de euros) de la unidad, según recogió el diario Nikkei. El conglomerado tecnológico y de infraestructura japonés decidió priorizar así esta oferta sobre otras, como las presentadas por la taiwanesa Hon Hai (Fox Conn) y la estadounidense Broadcom.
Toshiba argumentó que de esta forma podrá “asegurar más recursos de gestión esenciales para el crecimiento continuado del negocio de chips, y para ayudar a Toshiba a mejorar su estructura financiera”.
La compañía tokiota busca llegar a un acuerdo antes de la reunión de inversores del próximo 28 de junio y cerrar la transacción en el ejercicio fiscal nipón en curso, que finalizará en marzo de 2018, según explicó en el comunicado.
La operación todavía podría encontrar obstáculos, dado el interés de la estadounidense Western Digital -socio de Toshiba en la planta japonesa donde produce sus chips y que gestionan conjuntamente- por bloquear una venta que no la incluya y pueda causarle pérdidas.