Unas horas más tarde de la queja emitida por el New York Times sobre las malas condiciones de trabajo de miles de empleados que participan en la producción del iPad en Foxconn, Apple responde públicamente la defensa de todos los cargos, incluso destacando su compromiso en ese sentido.
La respuesta proviene directamente de Tim Cook, el actual CEO de la compañía de Cupertino, que a través de una carta publicada expresó su posición sobre el tema.
La carta firmada Tim Cook ha está basada en el deseo por parte de Apple de asumir el papel de los líderes conscientes de lo que está sucediendo detrás suyo y constantemente se preocupan por todos los aspectos de la cadena de producción de los dispositivos. Apple, por lo tanto, se distancia de las reclamaciones formuladas en su contra, incluyendo el artículo del New York Times que representa sólo el último ejemplo, en orden cronológico, considerado ofensivo, pero también totalmente infundadas.
«Como compañía y como individuos, estamos definidos por nuestros valores. Lamentablemente, algunas personas dudan del valor de Apple, y me gustaría discutir con usted directamente. Nos preocupamos por cada trabajador que forma parte de nuestra cadena de producción internacional. Cada incidente es una decepción para nosotros, todos los problemas sobre las condiciones de trabajo es motivo de preocupación. Todas las declaraciones acerca de nuestra falta de interés en estos temas es absolutamente falsa y ofensiva.»
Con estas palabras el CEO de Apple defendió a la compañía, teniendo en cuenta que siempre ha estado atenta a los problemas que se presentan y han llegado a diferentes acuerdos con sus proveedores para que garanticen su empleados que trabajan al menos las condiciones suficientes.
Varios representantes de Apple han visitado varias veces al día las muchas fábricas donde se producen los dispositivos, denunciando los abusos y solicitando la intervención directa de la empresa.
Apple, por lo tanto, pretende ser una de las empresas más sensibles a las condiciones de los trabajadores involucrados en la fabricación de sus productos, observar la situación a gran escala y educar a los trabajadores sobre sus derechos para obligar a que informen las posibles violaciones.
Teresa A.