Son muy diferentes las viviendas que albergan un núcleo familiar al uso (padre, madre e hijo/s) de las compuestas por personas mayores. Cada hogar debe adaptarse a las necesidades de las personas que viven en él. En Estados Unidos, las viviendas adaptadas para personas de la tercera edad son muy comunes, especialmente en núcleos urbanos. En España, a medida que la generación del baby boom va envejeciendo están surgiendo nuevas necesidades que hacen referencia a este nuevo concepto. Los ancianos desean vivir cerca de sus familias, en entornos conocidos y en viviendas que les faciliten la vida lo máximo posible ¿Sabéis cómo es el hogar ideal para personas mayores? Estas son algunas de las claves:
- Accesibilidad: Por lo general, las personas mayores viven en pisos antiguos, que en la mayoría de los casos no cuentan con unas condiciones óptimas de accesibilidad. Es fundamental que el edificio cuente con rampas, barandillas y ascensores que ayuden a los ancianos a desplazarse. Aunque este tipo de problemas de accesibilidad son más comunes en el entorno de la vivienda, también pueden estar presentes dentro de la misma. Es muy recomendable instalar asideras o apliques de seguridad en las duchas y bañeras, o en cualquier zona que pueda resultar peligrosa. Existen organizaciones, como la Fundación Mutua de Propietarios que ayudan a mejorar la accesibilidad de las personas con movilidad reducida, a la vivienda y a su entorno.
- Tecnología: La tecnología aporta soluciones que pueden facilitar la vida de las personas mayores. Las innovaciones en domótica permiten un control más sencillo del hogar. Sin embargo, no podemos olvidar que estas personas no son nativas digitales, por lo que precisan sistemas muy sencillos y adaptados. Alquilovers, plataforma online de alquiler de inmuebles, dispone de una amplia cartera de viviendas con todo tipo de tecnologías adaptadas para los usuarios.
- Seguridad: Del mismo modo, es importante que un hogar adaptado para personas mayores cuente con unas medidas de seguridad determinadas. Ante cualquier incidente, los ancianos están menos capacitados para reaccionar. Instalar un detector de incendios, o programar el teléfono para llamar de forma rápida a la policía o al hospital puede ser de gran utilidad.