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El consejo de ministros del gobierno español ha autorizado la compra del MareNostrum 4, uno de los supercomputadores que integran el proyecto europeo Partnership for Advanced Computing in Europe (PRACE). Para ello ha sido necesario reajustar las cuentas del Ministerio de Economía y Competitividad, que destinará 34 millones de euros al Barcelona Supercomputing Center (BSC), centro en el que se instalará el MareNostrum 4. Este compromiso de gasto abre un proceso de licitación y compra. La inversión se justifica como una apuesta por el conocimiento y el desarrollo del I+D+i. La compra e instalación del supercomputador será producto del convenio entre el Ministerio de Economía y Competitividad y el consorcio Barcelona Supercomputing Center.

De esta forma, España sigue unida, junto con otros tres países, a la iniciativa europea PRACE, destinada a consolidar una red de supercomputación del más alto rendimiento. Los otros tres países o socios del proyecto son Francia, Alemania e Italia.

El ordenador de Barcelona será así uno de los principales nodos de esta infraestructura informática europea que tiene el objetivo de potenciar la competitividad tecnológica y científica de la Unión Europea. En concreto, MareNostrum 4 hace posibles complejas operaciones de cálculos profundos, que a su vez permiten realizar simulaciones más avanzadas que los ordenadores convencionales. Por tanto, este superordenador supondrá un avance tanto en la red de Infraestructuras Tecnológicas Singulares (ICTS) como en la Red Española de Supercomputación (RES).

La instalación del MareNostrum 4 significará el desmontaje del MareNostrum 3, cuyos componentes irán a parar a diferentes nódulos de la RES.

De acuerdo con Soraya Saénz de Santamaría, vicepresidenta del gobierno, esta inversión presupuestaria representa un ejemplo de buena colaboración entre distintos organismos de la administración pública, manifestando así una gestión compartida y eficiente de los recursos públicos. En este caso, la gestión corresponde al Estado, la Generalitat de Catalunya y la Universidad Politécnica de Cataluña.

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