El Parlamento Europeo ha aprobado su informe anual sobre política de competencia de la Comisión Europea. El informe «Annual report on EU Competition Policy» pone en el punto de mira a los ‘gigantes’ de Internet, a los que sitúa en una “posición dominante” en el mercado y para los que reclama igualdad de condiciones en materia de competencia y regulación fiscal. El caso Google es uno de los puntos más destacados del informe, por el enorme poder que posee el buscador de Internet en el mercado de las telecomunicaciones en Europa.
Así, el informe del Parlamento cuestiona “la larga duración de las investigaciones” sobre el caso Google y lamenta que las investigaciones se prolonguen ya desde hace años sin transparencia y sin ningún resultado definitivo.
En esta línea, pide a la Comisión que investigue con detenimiento la práctica de Google de ofrecer su sistema operativo Android exclusivamente en combinación con otros servicios suyos, lo que impide a los fabricantes la preinstalación de productos de la competencia.
También reclama un examen del dominio del mercado que Google ejerce en el ámbito de las reservas hoteleras al tiempo que solicita la puesta en marcha de medidas que frenen el poder del buscador en pos de un mayor grado de interoperabilidad y portabilidad en todos los sectores digitales.
A partir del caso Google, el informe llama la atención sobre el “poder de las plataformas de internet dominantes” como eBay, Facebook, Apple, LinkedIn, Amazon, Uber, Airbnb, etc., para las que pide nuevas medidas regulatorias que garanticen una mayor protección de los usuarios.
Ante esta situación considera que es fundamental garantizar la igualdad de condiciones de competencia en el mercado digital con el objetivo de evitar una concentración excesiva y abusos de posición dominante. Estas medidas servirían para garantizas “un nivel superior de servicio para los consumidores y la posibilidad de lograr precios más atractivos”.
No obstante, el Informe defiende que la política de competencia eficaz y creíble no debe orientarse exclusivamente a la reducción de los precios de consumo, sino que también debe tener en cuenta los intereses estratégicos de la economía europea, como: la capacidad de innovar; las inversiones; la competitividad y la sostenibilidad.
Y todo con el objetivo de evitar que empresas como Google, denominadas OTT (‘over the top’), ocupen el mercado de las telecomunicaciones, aprovechando los beneficios que supone la falta de una regulación simétrica a la que existe para las grandes operadoras del sector.
Prueba de ello es la regulación fiscal aplicada a estas grandes empresas frente a las grandes telcos europeas como Telefónica, con las que consiguen grandes beneficios en el mercado Europeo a un coste muy bajo. Prueba de ello es que, según informa El Confidencial, Telefónica destinó en 2013 cerca de 3.500 millones de euros en aportaciones fiscales a Hacienda, mientas que los impuestos pagados por las siete OTT más relevantes en España, como son Apple, Google, Facebook, Yahoo, Microsoft, Amazon o Twitter, no sumaron más que 17 millones de euros en su conjunto.
Para conseguir esto, el Parlamento Europeo solicita una evaluación jurídica y económica exhaustiva por parte de la Comisión Europea de los mercados en rápida transformación y los modelos de negocio efímeros empleados por las empresas digitales, con el fin de comprender con claridad las estructuras y las tendencias del mercado, tomar las medidas apropiadas para proteger a los consumidores y tener debidamente en cuenta la importancia de los datos y de las estructuras de mercado específicas de la economía digital.
El informe, liderado por el MEP alemán Werner Langen (EPP) y aprobado por 500 votos a favor y 137 en contra, clama porque Europa no se quede al margen de la revolución digital. Es hora de actuar y evitar que sean las grandes multinacionales estadounidenses las que dominen el mercado de las telecomunicaciones y todo lo que ello conlleva.