El gigante tecnológico surcoreano Samsung ha decidido abaratar tanto el Galaxy S6 como el Galaxy S6 Edge. La razón es la bajada en la venta de estos productos. En el último trimestre, siguiendo la tendencia de los seis anteriores, las ventas de estos dos teléfonos inteligentes volvieron a reducirse. Tanto es así que, en sus resultados financieros, la compañía ha registrado una bajada en los beneficios hasta los 4.472 millones de euros, un 8 por ciento menos que los beneficios acumulados en 2014.
Pero no solo se han reducido las ventas de los dos smartphones mencionados, sino que ha ocurrido lo mismo con el resto de terminales Samsung. Si en 2014, la empresa facturó 3.800 en este conceptos, en 2015 solo han llegado a 2.400; es decir, un 37 por ciento menos. Por ello, Samsung tiene previsto un recorte en el precio de dos de sus terminales más representativas, el Galaxy S6 y el Galaxy S6 Edge.
Con ello, Samsung espera seguir plantando cara a sus dos principales competidoras: Apple y Xiaomi, que están aspirando a llevarse la parte del león de unos años a esta parte. Parece que el problema de Samsung no está en la calidad de sus teléfonos, sino más bien en el precio; por ello, parece que la medida adoptada por Samsung apunta en la dirección correcta.
Hay que decir, con todo, que Samsung sigue liderando las ventas mundiales de smartphones, aunque su margen de liderazgo va siendo más y más pequeño. Pero la empresa no quiere perder el primer puesto, puesto que está a punto de lanzar al mercado sus últimas novedades: el Galaxy Note 5, de inminente presentación, y el Galaxy Edge S6 Plus.
A día de hoy, sin ir más lejos, el precio del Galaxy S6 Edge en la tienda oficial online de Samsung es de 699 euros.
