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Samsung Electronics, la compañía surcoreana de tecnología, ha presentado sus novedades en la gama alta de su telefonía móvil de la mano de su CEO, J. K. Shin. La empresa suele presentar las novedades de la temporada hacia el mes de octubre de cada año, pero este año ha querido adelantarse en vista de que está perdiendo competitividad comercial con respecto a sus rivales en el mercado.

Para recuperar la cuota de mercado perdida, Samsung ha querido apostar por tres factores, a saber: aumentar el tamaño de sus pantallas, dotar de más potencia a los dispositivos y, por último, ofrecer un servicio de pagos.

La estrella de los terminales presentados por Samsung ha sido el Galaxy Note 5, que incluye, además de la tradicional pantalla grande, un puntero que tiene la particularidad de ser retráctil. La pantalla de este Galaxy Note 5 se basará en tecnología Super AMOLED con 5,7 pulgadas y con una resolución de 2,560 x 1,440 píxeles. El nuevo chip le dota de una potencia de 4GB de memoria RAM. La cámara de este terminal tendrá, por su parte, 16 megapíxeles. Otra de las innovaciones introducidas en este teléfono es la posibilidad de realizar una carga inalámbrica a gran velocidad, que alimentará por completo la batería en no más de dos horas. Galaxy S6 Edge+ es otro de los teléfonos destacados presentados en esta ocasión por la compañía telefónica.

Aparte de lo dicho, Samsung ha dado los detalles de su sistema de pago, la plataforma Samsung Pay, con la que el usuario podrá abonar pagos móviles. Este servicio responde a Apple Pay, anunciado el año pasado por este fabricante competidor. También Google cuenta con un servicio de las mismas características desde este mismo 2015. Samsung Pay estará disponible en Corea del Sur y en EEUU en el mes de septiembre, pero todavía no hay fecha para su lanzamiento en Europa.

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