Por lo general las personas de la tercera edad consideran que la tecnología “es cosa de los jóvenes” y que nada tiene que ver con ellos. Sin embargo, actualmente existen dispositivos y aparatos tecnológicos que pueden facilitar mucho tanto la vida de los mayores como la de las personas a su cargo.
Las barreras arquitectónicas a la hora de acceder a la vivienda es un problema al que deben enfrentarse un gran número de personas mayores a diario y que muchos logran solventar gracias a la tecnología con el uso de ascensores, plataformas salvaescaleras, aparatos elevadores, etc. De hecho, cada vez más instituciones, como es el caso de Fundación Mutua de Propietarios, ofrecen ayudas a la accesibilidad para realizar la instalación este tipo de soluciones u otro tipo de intervenciones en los espacios comunes de los edificios.
Un gadget para la tercera edad que se está popularizando en nuestro país es el pastillero electrónico. Este aparato resulta muy útil para recordar a los mayores cuándo deben tomarse su correspondiente medicación, ya que pueden programarse avisos (sonoros y visuales) para las diferentes tomas diarias. Muchos de estos dispositivos también permiten ver en su pantalla las tomas que se han omitido y prácticamente todos los modelos del mercado incluyen un cierre de seguridad para dispensar solo las dosis definidas a las horas indicadas, con el fin de evitar la automedicación en casos de usuarios con pérdidas de memoria o enfermedades como el Alzheimer.
Los ”wearables” que tan de moda están hoy en día también pueden ser aparatos interesantes para la tercera edad; es el caso de las pulseras de actividad, ya que su manejo es más sencillo que el del “smartwatch” o el propio teléfono móvil. Estos dispositivos llevan GPS incorporado y, dependiendo del modelo, permiten medir ciertos parámetros de la actividad del usuario, como la cantidad de pasos que realiza al día, su pulso en tiempo real, o monitorizar el sueño. De hecho, pueden ser una opción muy interesante no solo para los mayores a los que les guste la tecnología, también para personas algo más dependientes, ya que permiten a las personas que están a su cargo conocer datos sobre su actividad diaria, calidad del sueño, o incluso saber dónde se encuentra la persona en ese momento.
Es por eso que la tecnología no tiene por qué asociarse solo a la juventud. Nuestros mayores también pueden beneficiarse de los avances tecnológicos con los que contamos en nuestra sociedad hoy en día.