Apple ha anunciado estudios sobre sus compañeros para comprobar las condiciones de trabajo de las unidades utilizadas en el montaje de los productos de Cupertino.
Foxconn se había convertido en algo urgente para el grupo de Apple, ya que se debió responder a las graves críticas debido a las condiciones laborales de los trabajadores en los centros de trabajo de los dispositivos de Apple.
Desde Apple han anunciado que la Fair Labor Association (FLA) llevará a cabo auditorías especiales a los proveedores de los empleados de Apple como voluntarios para el montaje final, incluyendo la fábrica de Foxconn en Shenzhen y Chengdu, China, a petición de Apple.
Así, un equipo de expertos en los derechos de los trabajadores encabezados por el presidente FLA Auret Van Heerden realizarán las primeras inspecciones que ya comienzan a realizarse esta mañana en una infraestructura de Shenzhen conocida como Foxconn City.
Apple afirma que pretende lograr un «trabajo seguro y equitativo» para las unidades involucradas en sus productos, por lo que pretende perseguir un perfil ético de la empresa en momentos en que apunta a los 500 millones de dólares de capitalización.
Tim Cook, director ejecutivo de Cupertino y sucesor de Steve Jobs, afirmó que: «las inspecciones en curso no tienen precedentes en la industria electrónica, tanto en escala y alcance, y somos conscientes de que la FLA tiene adherido a esta iniciativa mediante la identificación de plantas poco comunes en su informe».
FLA se reunirá con miles de trabajadores para investigar las condiciones de trabajo y la vida, incluida la salud y la seguridad, la remuneración y las horas de trabajo.
El equipo FLA llevará a cabo inspecciones de las instalaciones de fabricación, la vivienda y otras instalaciones, y también llevará a cabo un análisis exhaustivo de toda la documentación relativa a los procedimientos de cada fase de la relación laboral.
Teresa A.