El Tribunal de Apelaciones del Segundo Circuito Federal en Nueva York, Estados Unidos, ha fallado a favor de Google y considera legal su proyecto de escaneado de millones de libros con el fin de incluirlos en su biblioteca digital Google Books.
El tribunal argumenta que este proyecto de digitalización no vulnera en ningún caso los derechos de autor de esos libros, que habían sido reclamados por el Sindicato de Autores de Estados Unidos y por un puñado de autores que habían apelado a título individual. Todos ellos demandaron a Google en 2005, a los pocos meses de que el gigante tecnológico pusiera en marcha su aplicación Google Books. En la demanda federal, editores y autores afirmaban que Google había violado masivamente los derechos de autor.
El tribunal entiende que se ajustan a la ley tanto la digitalización de obras protegidas por la ley de derechos de autor como el sistema de búsqueda y la muestra de algunos fragmentos. El fallo fue tomado por los tres jueces integrantes del panel de dicho tribunal.
En la sentencia figura la siguiente afirmación de uno de esos jueces, Pierre Leval, los pasajes proporcionados por Google Books ofrecen un contexto suficiente para evaluar si el libro responde a los intereses del internauta. Esto es así porque la cantidad de información facilitada por Google Books no es suficiente para vulnerar los derechos de autor de editores y escritores.
El tribunal aduce que el servicio prestado por Google tiene un carácter público, razón que ha pesado más que la aducida por los demandantes, convencidos de que deben reconocerse sus derechos, ya que Google les causa un perjuicio económico en forma de pérdida de ingresos en concepto de derechos de autor.
Google, por el contrario, siempre ha mantenido la postura de que su biblioteca digital, lejos de perjudicar a autores y editores, les beneficia, porque se trata de un instrumento que ayuda a aumentar las ventas. La empresa de tecnología, de hecho, describe Google Books como un catálogo de libros en la era digital.