La adquisición de Skype por parte de Microsoft a cambio de la suma de $ 8,5 mil millones, es la más grande de la historia de la compañía de Redmond, pero ahora encuentra un nuevo obstáculo en su camino. Este obstáculo se llama Messagenet, una empresa italiana de telefonía en línea con sede en Milán, que se dirigió directamente a la Comisión Europea para solicitar el cumplimiento de las leyes antimonopolio.
La raíz de la historia es que Skype se distribuye junto con el sistema operativo Windows de Microsoft. Así, esto significaría colocar a Skype en una posición totalmente ventajosa, y es por ello que Messagenet pretende prohibir que Microsoft compre Skype . Tener un cliente de VoIP junto con la instalación del sistema operativo permite a los usuarios a prescindir de cualquier otra alternativa, pudiendo proceder de inmediato al registro o acceder para comenzar en el momento a comunicarse con los demás a través de Internet.
Pero no sólo en ello radica la problemática planteada por Messagenet, sino que a partir de los cargos con sede en Milán la compañía también incluye el abuso de posición dominante de Skype en sí, que impide que los sistemas desarrollados por otras compañías la interfaz con la red. La petición de Messagenet es, por lo tanto, una mayor apertura al exterior, brindando a los demás grupos la oportunidad de poner en marcha mecanismos de su software que puedan proporcionar una línea directa para comunicarse con los usuarios de Skype.
La cuestión planteada por Messagenet es similar a la que se vió en el pasado por parte de algunos de los principales fabricantes de navegadores, que han conseguido ser adecuados para Microsoft, culpable de distribuir su sistema operativo con un navegador por defecto en donde en muchos casos no había lugar para la competencia.
Teresa A.
