Los famosos smartwatches o relojes inteligentes, que irrumpieron con fuerza en el mercado hace un puñado de años, han perdido gran parte de su atractivo para los consumidores. Las ventas de estos wearables están desplomándose en picado.
International Data Corporation (IDC) es una consultora y suministradora relacionada con las tecnologías de la información y la comunicación. IDC ayuda a profesionales de este sector a tomar decisiones con fundamento real sobre inversiones en tecnología y estrategias de negocio.
Pues bien, IDC acaba de publicar un estudio estadístico sobre las ventas de relojes inteligentes durante el tercer trimestre de 2016. Los datos arrojados por el estudio son bien significativos. El que más llama la atención afirma que en el tercer trimestre de 2016 las ventas de smartwatches cayeron un 51,6% con respecto a los registros del mismo período en 2015.
El mismo informe que acompaña al estudio señala que, en estos mismos meses del ejercicio anterior, las ventas se dispararon como consecuencia del lanzamiento del Apple Watch. Sin embargo, según los autores de la investigación, este hecho no explica por sí solo el desplome registrado. Parte de la explicación hay que buscarla en las maniobras protagonizadas por otras compañías del sector, como Samsung o Android, es decir, Google.
Pese a la fuerte caída de ventas, Apple sigue a la cabeza de smartwatches vendidos. Ostenta una cuota de mercado del 41,3%. El segundo opuesto le corresponde a Garmin, que, a diferencia del resto de sus rivales, ha aumentado exponencialmente sus ventas en el último año gracias a la plataforma Connect IQ. Su cuota llega al 20,5%. En el tercer lugar se encuentra Samsung, con un 14,4% del total de las ventas, lo que supone un ascenso de 7 puntos con respecto a sus mismas cuentas de 2015. Al cuarto puesto ha caído Motorola, es decir, Lenovo, que ha visto cómo sus ventas se han recortado sensiblemente. El quinto puesto es para Pebble, con un 3,2% del total.