Hace ya años que la fibra óptica supera al ADSL en España y se ha ubicado como la principal opción de los usuarios nacionales que quieren tener acceso a Internet en su vivienda. Pero el repaso de cada nueva estadística no hace más que demostrar que esta tecnología aún posee potencial de crecimiento en el país.
En efecto, así lo indica el último informe presentado por el Consejo Europeo de FTTH, que ha analizado los números de 39 países de todo el continente europeo, para establecer un orden de aquellos en los que más aumenta la demanda de fibra óptica. En pos de obtener las próximas conclusiones, se consideraron los meses entre septiembre de 2018 y septiembre de 2019. Es decir, no hay ninguna influencia del coronavirus.
Con las cifras en la mano de unas 150 empresas en el sector, estos especialistas concluyeron entonces que España ha sumado, en ese período más de 1,65 millones de suscriptores de fibra óptica, ubicándose sólo por detrás de Francia, que en el mismo tiempo ganó más de 1,92 millones de clientes de esta clase de servicios.
Sin embargo, al tratarse de dos mercados donde la fibra ya tiene un desarrollo de años, ninguno de ellos entra en el top 5 de los que más han crecido proporcionalmente en tal lapso, grupo en el que se hallan Grecia (+285%), Irlanda (+185%), Suiza (+176%), Bélgica (+111%) e Italia (+45,3%). Situaciones muy diferentes por país, como se ve.
Si tomamos el conjunto de las 39 naciones que fueron convocadas para este relevamiento, el aumento porcentual del número de usuarios de fibra óptica en Europa, entre septiembre de 2018 y septiembre de 2019, fue de un 15%.
Erzsébet Fitori, presidenta del Consejo Europeo de FTTH, manifestó al respecto que «la conectividad de muy alta capacidad no solo es crítica en tiempos de crisis, sino que también será fundamental para la recuperación económica y la transición hacia una economía verde y sostenible de la Unión Europea».